Nos urge la compasión
Sin duda la compasión caracterizaba a Jesús y vemos en muchos pasajes bíblicos cómo Él movido a compasión, alimento, liberó, sanó y hasta dio su vida por las personas. Todos nosotros que hemos recibido el glorioso encargo de predicar su palabra, no podemos ser inmunes a la compasión. Sin compasión no nos atreveremos a nada por salvar a aquellos que no saben el lugar a donde irán si no abren su corazón al evangelio. Es tiempo de predicar con compasión el mensaje de salvación.